Durante la noche del 12 de enero, María De Belén Icazatti caminaba por una calle de Desamparados, Capital, y observó que se estaban llevando a algunos menores detenidos, entre ellos había uno de tan sólo 11 años. Ella se acercó y les consultó a los efectivos por qué se los llevaban y a dónde, y si tenía que llamar a un abogado o avisar a sus familiares. Luego de eso los policías le pidieron su documentación, pero Belén no traía el DNI, por lo que fue detenida junto a los menores y llevada a la Comisaría 4º.
Antes de subir al patrullero pudo comunicarse con algunas compañeros de militancia, que se movilizaron con llamadas a abogados, por lo que Belén pudo salir a la 1 de la madrugada en libertad. Lo que la policía le hizo fue una contravención por desacato a la autoridad, siendo que cuando la subían al móvil policial le habían argumentado que la detenían por no llevar DNI.
En Sin plumas en la lengua hablamos con la protagonista, María De Belén Icazatti, sobre lo que fue otro nuevo caso de violencia institucional y abuso policial en San Juan