El 22 de Abril se celebró el día del trabajador/a de la construcción en nuestro país. La Lechuza no quiso pasar por alto esta fecha y conversó con Abel Aracena, quien ejerce este oficio y nos relató cuanto tiempo lleva haciéndolo, las diversas aristas en las que se desarrolla el trabajo, las condiciones laborales y el reconocimiento social.
Detrás de un diseño y de una planificación de cualquier casa o edificio, están quienes ponen el cuerpo, el esfuerzo y horas de su día para que los ladrillos y el cemento se conviertan en un techo firme.
Abel Aracena es un obrero de la construcción, que aprendió el oficio gracias a su padre. Empezó trabajando en pequeñas “changas” y al día de hoy se dedica a la edificación de casas. Reconoció que no siempre las pagas son acordes al gran esfuerzo que realizan “por ahí la gente no lo saben reconocer”.