Trabajadores y trabajadoras de producciones artesanales comercializadas en el centro sanjuanino, debieron suspender sus actividades cotidianas por la pandemia. Para conocer la realidad que atraviesan momentáneamente, nuestro movilero entrevistó al artesano Marcos Salas, que nos contextualizó su situación como trabajador de la Economía Popular.
A diferencia de otros trabajadores que se ocupan de producir y vender, quienes manufacturan artesanías, deben hacerlo en la intemperie de sitios públicos. La pandemia frenó sus actividades y solo reciben bolsones de mercadería “somos alrededor de 22, 23 artesanos, muchos con carga familiar”.
A diferencia de otros comerciantes que han podido reactivar de a poco sus ventas, el sector artesano vive otra realidad “hemos presentado un protocolo para volver, entendemos que estamos en el medio de una pandemia y tenemos que cumplir medidas sanitarias”. Este protocolo se presentó a Cultura del municipio de la Capital pero no han tenido respuestas “la necesidad primaria es volver a trabajar y sobre el curso ir viendo las demás cuestiones”.